miércoles, 31 de mayo de 2017

Deficiencias Nutricionales más frecuentes de las plantaciones de Acacia mangium establecidas en la altillanura Colombiana




Contexto

Los suelos de la altillanura disectada soportan pastizales degradados caracterizados por su alta acidez y muy bajos contenidos de macro y micronutrientes esenciales para el rendimiento óptimo de los árboles. Además, las condiciones físicas del suelo, como la alta pedregosidad en la primera capa del suelo de 0 a 20 cm, se encuentra presente en la mayor parte de éste paisaje. Tal situación, refleja aún más la baja oferta nutricional para los árboles, que en los análisis de muestra en el laboratorio no tienen en cuenta ésta variable y al momento de realizar la formulación o cálculo de las dosis, puede crear un sesgo en la fertilización, que al poco tiempo de establecidas las plantaciones, comienzan a manifestar síntomas visuales de deficiencia nutricional.


Síntomas visuales de deficiencia nutricional en Acacia mangium

Para determinar con eficacia la presencia de alguna deficiencia nutricional en un rodal se debe tener en cuenta factores como: Gradiente del síntoma en la planta, simetría de los síntomas, distribución de los síntomas en el campo y las condiciones generales del cultivo que indican la existencia de un déficit nutricional en macro o micro elementos.
  • Gradiente del Síntoma
La manifestación de los síntomas debe cumplir la regla, que en el caso de los nutrientes móviles (N, P, K, Mg) los síntomas aparecen en las hojas viejas y el en caso de los elementos inmóviles o poco inmóviles (B, S, Ca, Cu, Fe, Mn, Zn), los síntomas son más evidentes en las hojas nuevas. De esta manera se establece el gradiente del síntoma que en los elementos móviles es más acentuado en las hojas del estrato inferior de la copa del árbol y se hace menos evidente progresivamente hacia arriba en el estrato superior, mientras en los inmóviles, el gradiente del síntoma es de arriba hacia abajo, es decir, desde la yema apical hasta la zona más cercana al estrato inferior de la copa (Instituto de Pesquisas e Estudos Florestais, 2003).
  • Simetría del Síntoma
Es otro patrón sistemático que se debe cumplir en el diagnóstico y consiste en la forma organizada en que debe aparecer la deficiencia del nutriente. El síntoma aparece en ambos lados de la copa en las hojas de un mismo par o en hojas sucesivas y distribuida de abajo hacia arriba para elementos móviles y de arriba hacia abajo para los nutrientes inmóviles (Instituto de Pesquisas e Estudos Florestais, 2003).
  •  Distribución de los síntomas en el campo
Las deficiencias de los nutrientes aparecen en los lotes o rodales en áreas relativamente grandes y no se limitan a árboles aislados, pero si en un grupo pequeño. Esta es una forma de diferenciar entre un síntoma de deficiencia nutricional y síntomas de plagas y enfermedades. En algunos casos se pueden observar un aparente síntoma de un déficit nutricional de un elemento móvil que puede ser confundido por la quemazón de las hojas, debido a una aplicación de herbicida a la deriva (IPEF, 2003, R&R Agroflorestal, 2012).
  •  Condiciones generales del rodal que evidencia la deficiencia nutricional
La productividad y el ritmo de crecimiento de los rodales, son aspectos que ayudan a pensar en la existencia de deficiencias nutricionales y más cuando aparecen ciertas condiciones en la plantación, tales como: crecimiento limitado de las raíces, diferencias de crecimiento con rodales adyacentes, secamiento temprano de ramas, disminución del follaje y  síntomas en las hojas que aparecen en cualquier fase de crecimiento de la plantación.
  • Síntomas de deficiencia nutricional en Fósforo y Potasio
A continuación se muestran la apariencia de las hojas cuando hay déficit en Fósforo y Potasio.

Fósforo: Es un elemento altamente móvil dentro de la planta y los síntomas de deficiencia aparecen en las hojas viejas inicialmente con una coloración verde oscura, pasando a manchas moradas próximas a las márgenes, acompañado de puntuaciones necróticas (Ver Foto 1). La limitante en fósforo debe ser tomada en cuenta porque si no se corrige a tiempo, el arranque de la plantación estará comprometido (R&R Agroflorestal, 2012, Alvarado y Raigosa, 2012).









Potasio:Importante en la fisiología vegetal, siendo el encargado del control de apertura y cierre de estomas, proporciona mayor resistencia a la sequía, plagas y enfermedades. Actúa en el transporte de carbohidratos desde las hojas hacia el tallo y raíces. Es el responsable de la activación de muchas enzimas, inclusive en la síntesis de celulosa. Por ser un nutriente muy móvil en la planta, el síntoma aparece en hojas viejas con un enrojecimiento de los bordes de la hoja (clorosis y quemazón en forma de “V”)  y en el estado más avanzado se presenta el secamiento de los bordes.

La presencia del síntoma de deficiencia nutricional es más evidentes en aquellos rodales de A. mangium establecidos en sitios de colinas con suelos que contienen un buen porcentajes de pedregosidad, mientras En las zonas intermedias y/o bajas el déficit en potasio se empieza a manifestar. En algunos Lotes localizados en el municipio de Puerto López, departamento del Meta,  con apenas con 6 meses de edad se evidencia el déficit en fósforo  y potasio, mientras en otros proyectos forestales de la misma región exhiben el déficit en potasio de manera notoria. En general, A. mangium es muy susceptible a presentar deficiencias en potasio y fósforo en suelos de la altillanura disectada.




Observaciones y/o Sugerencias

Si éste es su caso, debe tener en cuenta las siguientes recomendaciones:

Se deben corregir las dosis para la fertilización de arranque teniendo en cuenta el ajuste con el factor de corrección de la pedregosisdad del suelo.

Se debe revisar que la formulación química de la necesidad de K02 sea equivalente con la fuente comercial. Por ejemplo, si la necesidad de potasio es de 10 gr/planta su equivalente comercial en Cloruro de potasio será 14gr-KCl/ planta.

Iniciar los más pronto con la aplicación de fertilizantes y enmiendas a las plantaciones forestales.

Realizar un muestreo foliar y de suelos a los 18 meses de edad de las plantaciones para establecer causas o desbalances de nutrientes que pueden inhibir la absorción de otros y así mismo replantear o ajustar el plan de nutrición forestal.